jueves, 7 de febrero de 2013

Los chicos y la alimentación

La alimentación es una forma de comunicación entre la madre y el bebé, dar el pecho o la  mamadera en un ambiente cálido, de conexión y de ternura va dejando huellas psíquicas en el niño y construyendo su subjetividad.
Es saludable que desde esos primeros momentos que son las primeras experiencias del niño con la alimentación  y que están muy ligadas al contacto con el cuerpo materno, con las miradas, las caricias y las palabras sean experiencias placenteras para ambos.

El pasaje de líquido a solido es un momento muy importante en lo que respecta a la alimentación, es un momento donde es importante la exploración, permitir que el bebé juegue con los alimentos, que los toque, que se ensucie, que pase los alimentos por su carita, que juegue con la cuchara, que tome el vaso. Estas experiencias enmarcadas en un ámbito de juego, exploración y afecto marcan el futuro vínculo del niño con la alimentación.


Desde el año de vida los bebés ya pueden compartir la mesa con los adultos y es aconsejable que sea un momento compartido, un momento tranquilo, de reunión, de afecto y comunicación sin discusiones y sin televisión.


A los dos y tres años los chicos quieren hacer las cosas solitos, se van separando del adulto y explorando su independencia, es necesario darles la oportunidad de comer solitos aunque tarden. Hay que dejarlos que prueben aunque se ensucien, tiren la comida al piso, etc. El rechazo a la comida a esta edad  en ocasiones puede ser un intento de reforzar su independencia.




No hay que forzar a los chicos a comer, hay que ir familiarizándolos de a poco con los nuevos alimentos, cortar la comida en pequeños trozos, dar a los alimentos distintas formas, etc.


Hay que tratar de evitar las discusiones relacionadas con la comida, no hay que castigar a los chicos por que no comen ni sobornarlos.


Fallas en el vínculo entre el adulto y él bebe en estos primeros tiempos pueden generar algunos trastornos en la alimentación como ser fobia a la comida, anorexia, obesidad.


Conclusión


Alimentación y afecto están intimanente ligados. Dependiendo de cómo sean las primeras experiencias de encuentro del adulto y  el niño con la alimentación desde los primerísimos tiempos va a depender el vínculo del niño con la comida durante toda la vida

No hay comentarios: